© Lorena Amorós · 2024

SÍNTOMA DE LO VIVO

Instalación de pintura, vídeo, dibujo y escultura. Medidas variables. 2021.

Comisaria: Johanna Caplliure.


Proyecto realizado ex profeso para las salas 6 y 7 del DA2 (Domus Artium 2002) de Salamanca. (Del 14 de mayo de 2021 al 19 de septiembre de 2021). http://domusartium2002.com/es/EXPOSICION/lorena-amoros-sintoma-de-lo-vivo-2021

Las obras de nueva creación del proyecto SÍNTOMA DE LO VIVO han sido producidas en el marco de las Ayudas para la investigación, creación y producción artísticas en el campo de las artes visuales del Ministerio de Cultura y Deporte, en régimen de concurrencia competitiva. También en el régimen de concurrencia competitiva, este proyecto ha sido seleccionado por el ICA de la Región de Murcia. Ha colaborado el Domus Artium 2002 (DA2) de Salamanca y la Fundación Salamanca Ciudad de Cultura y Saberes.

Conceptualmente, todas las obras pretenden dar respuesta a cuestiones como: ¿Cómo narrar historias compartidas en temporalidades distintas? ¿Qué secretos puede revelarnos el cuerpo exánime de un animal? ¿Es posible combatir nuestros miedos insistiendo en las emociones que nos inquietan? ¿Cuánto hay de verdad en lo que sólo se muestra en apariencia? En todas las obras se identifican e intercambian mis anécdotas biográficas y de figuras históricas como, en este caso, Martha Maxwell (1831-1881), la primera taxidermista en crear dioramas donde podía verse a los animales naturalizados integrados en su hábitat. Desde los episodios notablemente excéntricos de la vida de Maxwell, las piezas que forman parte de la exposición reflexionan sobre la falsa naturaleza que implica la práctica de la taxidermia, donde se crean escenas dinámicas a partir de cuerpos inertes. En este sentido, no podemos olvidar que el arte se ha venido preocupando por un rescate de los cuerpos a través de las imágenes antes de su putrefacción. De hecho, en la mayoría de los casos, esta iconografía ambigua, entre lo animado y lo inanimado, insiste en un mensaje moralizante de lo efímero de los placeres y de los sentidos, que en Síntoma de lo vivo pretendo desarmar. Desde este punto de vista, por una parte, mi intención, es proponer un imaginario donde la simbología referida al animal nos interrogue sobre su verdadera naturaleza, sobre el dilema de las apariencias y, al mismo tiempo, mostrar el cruce de narraciones biográficas a través del relato común que comparto con Martha Maxwell. Un relato que revela un ángulo oscuro de nuestra relación con la naturaleza en el que la piel del animal, de nuestra animalidad, está muy presente.